El comportamiento del consumidor ha generado nuevas exigencias y posibilidades de ofertar productos o servicios en el mercado. Como empresa tradicional, ¿qué puedes hacer para atender esas exigencias que antes no solicitaba? ¿Y cómo redefinir la manera en relacionarte con él y atenderlos para seguir vendiendo? La respuesta: la digitalización. ¿Pero qué significa eso, exactamente?

El concepto de digitalización o cultura digital de las empresas, se está haciendo cada día más presente ya que, como comentábamos el consumidor está evolucionando. Ser competitivo y estar al momento que requieren una respuesta, es un valor agregado que hoy la mayoría está no solamente buscando, sino estableciendo un parámetro para saber si vuelve a comprarte algún producto o recomendar tus servicios con su círculo social, empresarial, etc.

Lo que se debe considerar es que afrontar un cambio de lo tradicional a lo digital es una necesidad que envuelve a todos los involucrados en las empresas, desde directivos hasta empleados, pues de nada sirve que solo los empleados utilicen las herramientas o aplicaciones y las jerarquías altas (jefes de área, gerentes, directivos, etc.) ni siquiera sepan cómo responder una solicitud en la que estén involucrados directamente para apoyar y colaborar a la resolución de algún problema. Hay que cambiar a la ideología de conectar todo (personas, procesos, cosas y datos).

Otro punto que si me gustaría considerar es que “digitalización” no significa tener “un facebook o un twitter” para la empresa, sino identificar nuevas oportunidades de negocio al incorporar herramientas de apoyo para digital en toda la organización.

Convertirse en un negocio digital no tiene porqué ser traumático ni tajante, aunque tienes que considerar no demorar más tiempo. Las empresas pueden comenzar con unos cambios pequeños que tengan un impacto grande; el cliente sin duda es el primero que lo nota. Puedes partir por aprovechar los recursos que ya tienes, usando usar las “cosas” existentes de manera nueva, y luego innovar y optimizar para que todo funcione mejor en conjunto.

Un ejemplo podría ser algo aparentemente “insignificante” como puede ser un correo electrónico, sin embargo el cliente lo percibe como una capacidad de respuesta eficiente con la información y/o resolución de lo que él requiere, un servicio de calidad y/o una empresa o negocio en el que puede confiar.

La imagen de una empresa digital no es única y absoluta. Se trata de transformar las cosas más importantes para ti y para tus clientes.

Entonces, lo digital simplemente es un paso más que se está dando en el mundo de los negocios, como siempre lo han dado. Bien dicen que quien no evoluciona, muere, pero sin duda hoy es necesario para caminar al ritmo de un parámetro muy importante para las personas como lo es internet y que ahora marca las cosas.

¿Listo para digitalizar tu empresa o negocio?