Cómo enseñar Historia en TikTok: divulgación en videos cortos
En las últimas décadas, la influencia de internet en nuestras vidas ha ido aumentando cada vez más. El campo de la educación no es la excepción: en estos tiempos es casi una necesidad para enseñar y aprender, pues ha facilitado el acceso a una infinidad de información. Pero no sólo ha permitido el acceso, sino que gracias a las redes sociales, también ha brindado un canal para compartirla y crear comunidades alrededor de ella.
Una de estas redes sociales es TikTok, la cual está creciendo a gran velocidad y es una de las más populares en la actualidad. Lanzada en 2017 al mercado internacional, tiene más de 689 millones de usuarios activos en un mes, casi todos ellos adolescentes y jóvenes, según el Digital 2021 Global Overview Report realizado por las empresas We are social y Hootsuite.
TikTok permite la creación y visualización de videos cortos, de 15 a 60 segundos, de manera fácil y rápida, pues cuenta con una interfaz simple e intuitiva, una amplia variedad de efectos y sonidos disponibles para la edición del contenido, así como tecnología AI (Inteligencia Artificial), por lo que su algoritmo filtra eficientemente las preferencias de los usuarios de acuerdo a sus interacciones.
Asimismo, es muy fácil hacer búsquedas temáticas con hashtags; por lo que la sencillez con la que se puede compartir y encontrar información, y el hecho de que esté basada en un recurso dinámico y atractivo como lo son los videos cortos, hacen de TikTok un vehículo excelente para la divulgación científica y humanística, sobre todo entre los jóvenes y adolescentes. Algunos usuarios ya han comenzado a usar la plataforma para crear contenido educativo sobre Historia y otros temas afines.
¿Se puede enseñar Historia en TikTok?
Estas cuentas crean cápsulas donde hacen uso de recursos como efectos y edición para darle un giro de humor y contemporaneidad a estos asuntos, tradicionalmente considerados obsoletos; además, el formato y el uso de videos cortos logra transmitir la información de manera concreta. Todo esto hace más fácil enseñar los temas a los espectadores y que éstos los retengan.
HistoriaParaTontos es la cuenta de Historia en TikTok por excelencia: con más de 5.2 millones de seguidores, este internacionalista, que ha preferido mantenerse en el anonimato, personifica los países y personajes de los pasajes históricos que relata por medio de un filtro, de ahí su sello característico: un mapa de México con ojos y boca.
En esta cuenta, todos los países y personajes hablan como un chilango promedio, y hacen comparaciones con situaciones y escenarios del presente, como cuando los mexicas deciden salir de Aztlán para irse a un lugar “más mamón, como Polanco o Santa Fe”.
Muñiz es otra cuenta de divulgación de contenidos históricos. Cuenta con 1.6 millones de seguidores, y aunque su anfitrión también hace uso de filtros y efectos para edición, no los utiliza para camuflarse, sino que su formato se acerca más al del sketch y más bien los usa para ambientar las escenificaciones; en las que utiliza accesorios del diario como ropa o lentes para caracterizarse e interpretar a todos los personajes históricos.
Con todo, la cantidad de usuarios que se dedican a crear este tipo de contenido que combina el humor y el aprendizaje es reducida, y muchas veces sus cuentas no están dedicadas exclusivamente a enseñar y divulgar Historia, sino que son segmentos dentro de ellas, dedicadas a temas más amplios.
Tal es el caso de Anais Patiño, cuya cuenta difunde mucha Historia de la Ciencia, pero también curiosidades médicas, o Jeremy Shepherd, un estadounidense viviendo en México que desmiente la Historia que le enseñaron en su país, pero sólo como una parte de su cuenta, en la que documenta su proceso de encuentro y adaptación al español y a la cultura mexicana.
La idea y el formato de TikTok son una gran ventana de oportunidad para docentes y profesionales de la Historia para facilitar la divulgación y enseñanza de su materia, y hacerla más atractiva, sobre todo entre adolescentes y jóvenes, la cual necesitamos aprovechar ya. Igualmente, como sociedad, es preciso desmitificar el uso ocioso de las redes sociales y otras herramientas digitales; y entender que también en el ocio y el humor es posible aprender.
Diseña ambientes de aprendizaje
en entornos digitales
Referencias:
- Covid-19 y TikTok. Análisis de la Folksonomía social - Risti, Revista Ibérica de Sistemas e Tecnologias de Informação
- TikTok challenge: Escuelas filosóficas. Una experiencia de aprendizaje autodirigido desde la heutagogía y el conectivismo - Fundación Universitaria del Área Andina